Quizá lo único que nos vuelve humanos sea la muerte, ese punto final que nos regresa hacia nosotros mismos. Sin ambigüedad, sin incertidumbre, sin vacilaciones. La puerta que anula el tic-tac, la deriva de sucesos, la tierra movediza de lo que todavía no se completa. Mientras, el miedo y la violencia nos rescatan de la nada, o nos acercan al Todo.Y el mal nos abre la posibilidad de ejercer la l...
De las vidas múltiples que potencialmente podemos vivir los seres humanos, es indudable que en general domina en ellas la planicie de lo intrascendente. Salvo en los planos donde lo que se gana es lo improbable, lo insólito, allí se rebasa el nivel cotidiano y nos volvemos héroes, creaturas intuitivas y sagaces, atemporales. Esta posibilidad se abre sólo en los terrenos imaginarios, en donde lo...